
Los científicos han encontrado nuevas pistas que apuntan a la existencia de un misterioso planeta oculto en los confines del sistema solar, conocido como el "Planeta Nueve" o "Planeta X".
Gracias a más de 40 años de datos recopilados por los satélites IRAS y AKARI, un equipo internacional de astrónomos de Taiwán, Japón y Australia ha logrado identificar señales que podrían corresponder a este enigmático objeto.
De confirmarse su existencia, este hallazgo podría reescribir lo que se conoce sobre el cosmos. Según las investigaciones, este posible planeta estaría ubicado a una distancia colosal del Sol, casi 20 veces más lejos que Plutón, en una región helada más allá del Cinturón de Kuiper.
Los científicos creen que, de existir, el Planeta Nueve sería un gigante helado, similar a Urano o Neptuno, con temperaturas estimadas entre -200°C y -205°C. En ese entorno tan extremo, la vida tal como la conocemos sería prácticamente imposible.
No obstante, no se descarta la posibilidad de la existencia de microorganismos extremófilos, capaces de sobrevivir en condiciones tan adversas. Estos seres tendrían que encontrar una fuente de energía diferente al Sol, cuya luz apenas llegaría a esa lejanía, y sería muy poco probable que existiera agua líquida en la superficie.
Este misterioso planeta sigue siendo objeto de intensa investigación por parte de la comunidad científica. Su posible descubrimiento podría tener implicaciones trascendentales para nuestra comprensión del sistema solar y del universo en general.