En una cumbre histórica celebrada en Pyongyang, el presidente ruso Vladimir Putin y el líder norcoreano Kim Jong Un han firmado un nuevo pacto que solidifica su compromiso de defensa mutua. El acuerdo se produce en un momento crucial, ya que ambos países enfrentan crecientes confrontaciones con Occidente.
Durante la rara visita de Putin al reclusivo estado nuclear, los líderes se comprometieron a fortalecer los lazos bilaterales y abordar las preocupaciones de seguridad regional. El pacto representa un hito significativo en su relación, afianzando aún más la asociación estratégica entre Rusia y Corea del Norte.
Putin: "El acuerdo de asociación integral establece, entre otras cosas, la provisión de asistencia mutua en caso de agresión contra una de las partes de este documento".
Jefe de la OTAN: "El apoyo potencial que Rusia brinda a Corea del Norte ... es respaldar sus programas de misiles y nucleares".